cáncer

Entre los minerales que más se necesitan añadir a la dieta para el buen desarrollo del organismo, el zinc es uno de los que debe  faltar. Lamentablemente, muchos lo olvidamos.

¿Por qué no podemos olvidar el zinc? Mira esta lista, y  comprobarás algunas consecuencias de su carencia:

– La piel es una de las más afectadas. Para algunos especialistas, el acné, la psoriasis y otras complicaciones cutáneas, se verían reducidas si el cuerpo contara con una cantidad considerable de zinc.

– Los problemas de falta de visión se asocian a la carencia de este mineral, el que al paso del tiempo es menor en el organismo, y puede ser la causa de las limitaciones visuales en las personas de edad avanzada.

– Como es un buen antioxidante, también reduce la posibilidad de padecer de cáncer.

– Irregularidades menstruales también se asocian a su carencia, y hasta las complicaciones que son muy riesgosas a la hora del parto.

La deficiente alimentación es uno de los problemas que están relacionados con muchas de las enfermedades y trastornos en las personas, la Unión Europea alerta sobre esto por los peligros que trae para la vida y clama por una balanceada dieta desde la niñez.

¿Qué te aportan?  Vitamina C, es un antioxidante que protege contra el cáncer, y es además diurético.
¿Cómo consumirlos? A muchas personas le encantan crudos en ensaladas, pero también pueden consumirse cocidos o después de ponerlos al horno unos minutos.
¿Qué aportan sensorialmente?  Como son ligeramente picantes, suelen dar un sabor especial a las comidas, además de que su color en la mesa apuesta por los matices blanco y rojo. Son ideales para decorar platos.

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Michael Douglas ha logrado vencer en la batalla contra el cáncer de garganta que sufría, y que le ha obligado a someterse a un intenso tratamiento en el último medio año. En agosto de 2010, a Douglas se le diagnosticó un tumor maligno en la garganta que se encontraba en fase 4, aunque no había metástasis.

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Un frecuente tumor benigno de la piel tiene alteraciones genéticas que también están muy implicadas en otros tipos de cáncer, como el de vejiga. Sin embargo, «estas lesiones dermatológicas nunca degeneran en cáncer», según Agustí Toll, dermatólogo y uno de los autores del estudio, publicado en la revista científica PNAS.