penetración

Aunque para muchos sea sinónimo de cama, la sexualidad va más allá del coito como tal porque no es solo acostarme para relaciones de penetración. Incluso, hay personas que lo viven intensamente sin llegar al orgasmo.

Sexualidad es también miradas picantes, besos, caricias, llamadas telefónicas, sutiles toques de los cuerpos, y sin llegar al coito que termina en el orgasmo, pueden dejar mejores emociones porque quedan los placeres sin agotarse.

Lamentablemente, sobre todo los hombres, no se resisten a pasar de inmediato a la finalidad del acto sexual, mientras que las mujeres prefieren más esta sexualidad rica en experiencias maravillosas para los sentidos. Ésta es una de las principales diferencias sexuales entre los dos sexos.

Él está sentado, la espalda bien recta contra el respaldo, las piernas ligeramente apretadas y los pies anclados al suelo. Colócate frente a él, con las piernas abiertas. Rodéale con tus piernas y brazos.
Esta postura tiene la ventaja de ser una postura tierna, cariñosa y permite mirarse a los ojos. Las cuatro manos se quedan libres y pueden acariciar vuestros cuerpos. Estás en la postura del capitán: eres tú quien marca el ritmo, puedes acelerar o aminorar el ritmo, así como la profundidad de la penetración.