tetas

Las chicas coquetas son activas y divertidas, a los hombres nos encantan porque dejan tras sí una estela de pasión que nadie resiste. Yo soy uno de ellos, las busco, las excito para que sean más picantonas, ¡molan!

En discotecas es donde más encuentro a estas chicas. ¿Sabes cómo las reconozco? No es secreto para nadie, pero te aseguro que me ponen el pene duro con solo sentirlas cerca. Aunque otros chicos las identifican por sus miradas, yo las descubro por más: se pegan a mí y me dejan ver la entrada de sus tetas, cruzan las piernas para que vea que no lleva bragas, ¿o sí?, bueno, eso lo descubro después. Si bailo con ellas se pegan como una babosa, ¡guao, me levantan todo el ánimo!, y si estamos sentados, buscan pegar sus muslos a los míos.

Señales eróticas no les faltan a estas chicas calentonas que insinúan que quieren cama conmigo.  El problema está en que no hay cama cerca y tengo que resolver rapidito el sexo con ellas en un jardín, un rincón, el trastero, o donde sea.

Es entonces cuando descubro lo sensacional, ¡cómo se ponen cuando entran en el coqueteo conmigo! En seguida que llego a ellas a un rinconcito apartado descubro:

– Está excitada, se mueve mucho, se pone nerviosa, acelera su paso, ¡buena señal de que quiere llegar ya al sexo de una vez!

– Al tocarle las tetas las tiene duras, firmes y sus pezones parecen puntas de hierro, ¡guao, que gustazo!

– Al llegar a su vagina, descubro que no necesita nada más para excitarse, la tiene mojadita y calentita, lista para colocar mi pene y llegar al orgasmo sin más ni más.

Cuando te encuentres con estas chicas en fiestas, en la playa, la discoteca y hasta como compañera de asiento en el tren, ya sabes, está loquita por llegar a todo contigo, utiliza tu mano sin más ni más, el sexo ligh es un gustazo que no podemos desperdiciar jamás.

Solo pensando en el logro pleno de la relación sexual, excita a los dos miembros de la pareja, porque su éxito reside en la complicidad y comunicación de los dos. Cada uno debe expresar sus gustos, prioridades y preferencias sin miedo a pensar en que la relación vaya al fracaso.

Consejos para las relaciones sexuales
Consejos para las relaciones sexuales

Por otra parte, el hombre debe aprender a decir si no le apetece algo que se dé en la relación sexual , al igual que la mujer, porque solo así logra pasar bien esas horas, todo lo contrario ocurre cuando uno de los dos no está satisfecho con lo que suceda.

Un ejemplo muy preciso es cuando el hombre quiere hacer el sexo griego y la mujer no, le duele o no le gusta ser penetrada por detrás. O cuando la mujer le besa las tetillas al chico o le acaricia las glúteos, para algunos chicos estas son partes eróticas femeninas, aunque está comprobado de que también ellos sienten placer en estas zonas de su cuerpo.,

Los estereotipos sexuales que minan aún a muchas relaciones, hablan de que la inapetencia sexual es un problema exclusivo de la mujer, y no es así. La inapetencia o bajo deseo sexual afecta por igual a hombres y mujeres, que actualmente están sometidos al mismo ritmo de vida. Estereotipos que hacen que el hombre lleve a cabo el acto sexual aunque no tenga motivaciones, porque si no lo hace, pierde su hombría.

Tanto hombres y mujeres, tenemos momentos en que no respondemos sexualmente. Naturalmente, este periodo difiere de unas personas a otras, pero es un hecho que se da constantemente. El estrés, la ausencia del deseo, la poca atracción por esa pareja, son algunos de los motivos por los que no se desea llegar al coito. Por otro lado, cuando nos lanzamos al disfrute con todo, el sexo sale más excitante.

1 1184

Eva Longoria, la latina explosiva de Mujeres Desesperadas, ha demostrado ser una chica estupenda y que es mucho más que una cabecita hueca por su papel actoral de la famosa serie.

La prensa le ha seguido los pasos por el culete estupendo de la chica, que si bien tiene una estatura pequeña y nada de grandes pechos de los que presumir, sí tiene un trasero que despierta a cualquier muerto. Y Eva ha sabido lucirlo con los vestidos que ha presentado en numerosas galas, en las que ha salido muy bien parada con la prensa.

Su imagen de chica alocada también se ha visto respaldada por sus últimas parejas, Eduardo Cruz, y entre otros el rumoreado rollito con Amaury Molasco, aunque ahora salta de nuevo a la vida pública por su posado para la Revista GQ. Por cierto, en la foto que presenta la revista luce radiante y con su belleza esplendorosa, algo que ya queríamos ver porque había quedado muy mal parada en otra del verano en que lucía bikini.

 Entre las formas de hacer el amor que te separará de la rutina sexual, está la podofilia, práctica sexual muy excitante, en la utilizas los pies para excitar a tu pareja.

Sentados o acostados uno frente al otro, con los dedos plantales tocas y acaricias las partes más suaves de su vagina, así como sus tetas y aquello puede convertirse una experiencia sexual tan apasionada que no olvidarás fácilmente. Ver a la mujer retorcerse de placer es lo que buscas y ahí tienes una manera de lograrlo. Una vez excitada a cien, sabrás de lo que es capaz una mujer bien excitada. Esto es en el caso de que seas hombre.

Si eres mujer también puedes hacerlo en esa posición al rozar con tus dedos de los pies los testículos y la piel del pene de tu chico, la espalda, y el pubis, todo suavemente. Pero mejor aún resulta el que  mientras hagas esto frente a él, frotes tu clítoris y tus tetas mientras lo miras. Verás que los dos no podrán aguantar el cachondeo y se correrán al poco rato de esta excitante postura sexual conocida como podofilia.

 

3 1664

No solo manos y boca hacen el placer en las caricias sexuales,  los pies también toman protagonismo en el sexo de manera excitante. Mi experiencia en ello la voy a contar.

Por años, tenía un vecino que me encantaba, aunque como vivía en un barrio de personas aparentemente muy respetuosas, no podía demostrarle que me gustaba, pues ambos estábamos casados. Hasta que se dio la oportunidad, y  quedamos en vernos en el cuarto de  un hotel para un ligoteo rico.

Ay, ni decirles lo que sentí al verlo sin camisa esperando por mí, con su ancho pecho y su suave mirar. Pero eso fue nada comparado con lo que sucedió en los preliminares. Me tendió boca arriba, no me permitió tocarlo, (que conste, que no usamos esposas) , y cuando yo estaba deseando a gritos que su boca pulposa me mamara, se fue a mis pies y me chupó suavemente uno por uno de los dedos. Oigan, chicas, si les digo que subí al cielo, no les miento. ¡Como me excitó! chuparme los pies, olerlos, besarlos, fue tan excitante como si lo hiciera en mi coño  o en las tetas. ¡Como para no olvidarlo nunca!

Como todo no fue más que un polvo, dejó el gratísimo sabor de una buenísimo rollo que no he vuelto a disfrutar, pues mi marido es alérgico a estas prácticas. Y yo, me sigo acordando de aquel momento, aunque hace dos años que sucedió y lo repaso minuto a minuto por pasos. ¿Qué opinan ustedes de mi excitante experiencia sexual?